martes, 8 de febrero de 2011

Elegir el camino.

"Estoy dispuesto a renunciar a todo", dijo el príncipe al maestro. Le ruego que me acepte como su discípulo. "

 "¿Cómo un hombre elige su camino?", Preguntó el maestro.

 "A través del sacrificio", respondió el príncipe.  "Un camino que exige sacrificio, es un verdadero camino."

 El maestro tropezó con una estantería.  Un jarrón precioso cayó, y el príncipe se arrojó con el fin de apoderarse de ella.  Cayó mal y se rompió el brazo, pero consiguió salvar el jarrón.

 "¿Cuál es el mayor sacrificio: ver el gran éxito de florero, o romper un brazo con el fin de salvarla", preguntó el maestro.

 "No sé", dijo el príncipe.

 -Entonces, ¿cómo se puede orientar su elección para el sacrificio? . El verdadero camino es elegido por nuestra capacidad de amor, de no sufrir por ello. "


miércoles, 2 de febrero de 2011

La carrera de sapos.


Era una vez una carrera... de sapos.

El objetivo era llegar a lo alto de una gran torre. Había en el lugar una gran multitud. Mucha gente para vibrar y gritar por ellos. Comenzó la competencia.

Pero como la multitud no creía que pudieran alcanzar la cima de aquella torre, lo que más se escuchaba era:

- ¡Qué pena!! Esos sapos no lo van a conseguir... no lo van a conseguir.

Los sapitos comenzaron a desistir. Pero había uno que persistía y continuaba subiendo en busca de la cima.

La multitud continuaba gritando:

- ¡Qué pena!! Ustedes no lo van a conseguir.

Y los sapitos estaban dándose por vencidos, salvo aquel sapito que seguía y seguía tranquilo, y ahora cada vez más con más fuerza.

Ya llegando el final de la competición todos desistieron, menos ese sapito que curiosamente en contra de todos, seguía. Llegó a la cima con todo su esfuerzo.

Los otros querían saber qué le había pasado. Un sapito le fue a preguntar cómo él había conseguido concluir la prueba.

Y descubrieron que... ¡Era sordo!.

¡No permitas que personas con pésimos hábitos de ser negativos derrumben las mejores y más sabias esperanzas de tu corazón!.

¡Recuerda siempre el poder que tienen las palabras que escuchas!.

Moraleja: Sé siempre SORDO cuando alguien te diga que no puedes realizar algún sueño.