Durante todo el año, los chicos y chicas de esta escuela, como pequeños orfebres, han ido tallando aprendizajes socialmente productivos para poder comprenderlos, analizarlos y utilizarlos en sus vidas cotidianas.
No fue tarea fácil. Tuvieron que poner mucho esfuerzo, ganas de aprender y constancia para superarse. Necesitaron el apoyo de sus familias y prudentes intervenciones de sus docentes.
Hoy, podemos afirmar que han experimentado crecientes grados de autonomía y de conciencia social que les permiten ser capaces de pensar, imaginar y construir proyectos personales y sociales desde el presente.
¡Felices Vacaciones para todos!
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